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Dr.Holon de febrero

21-02-2022

Dr.Holon de febrero
Durante esta etapa de epidemia muchos hemos sentido coartadas nuestras libertades. Restricciones de todo tipo, de movimiento, de horarios, de hábitos cotidianos…, pero lo hacíamos por un bien común y sobre todo para nuestra supervivencia. Y las personas en colectivo preferimos la obediencia como garantía para evitar el estrés.

Y ahora por suerte, la epidemia remite, y resulta que ya podemos salir, que quizás nos podremos sacar la mascarilla y podremos volver a nuestros hábitos anteriores. Y de repente, esta libertad nos da un poco de miedo, nos estresa. ¿Nos quitamos ya la mascarilla? ¿Puedo ir a un espectáculo con el aforo al 100%? En las escuelas se han acabado los confinamientos, y ahora, ¿qué puede pasar? Apostar por la libertad siempre es como un salto al vacío. Y esta incertidumbre, este cambio, siempre puede ser motivo de estrés.

Peter Sloterdijk, filósofo alemán que ha escrito el libro “Estrés y libertad”(2017) dice que la libertad es la disponibilidad para lo improbable. También es la rebelión contra lo que es ordinario. No obstante el individuo está abocado a amoldarse a la cantidad de estrés que puede tolerar en lugar de romper con el orden imperante.

Se ha dicho que el miedo es el factor más importante para quitarnos la libertad y que siempre la libertad es el privilegio de elegir lo mejor, no lo que es más fácil. Porque ser libre, la mayoría de las veces, requiere un esfuerzo, se tienen que tomar decisiones, y hacer cambios que pueden ocasionarnos estrés, pero si no lo hacemos, viviremos ahogados por los miedos que no nos dejarán avanzar, que nos harán sufrir y que nos darán una pobre existencia, sin esperanza.

Atrevámonos a ser libres, a pesar del grado de estrés que nos pueda ocasionar, y comprobaremos que cuando dejamos parte de nuestros miedos, nos sentimos más ligeros y que la vida ¡vale mucho la pena!
  • Dr. Holon de enero

    ¿Los deseos estresan?

    Cuando empezamos el año, todo el mundo nos desea lo mejor y que se cumpla. Los deseos forman parte de los saludos y muchas veces decimos suerte, que vaya bien, buen fin de semana, buen viaje…
    Pero siempre tenemos deseos y especialmente cuando acaba el año los recordamos o añadimos otros nuevos. El deseo es una fuente de motivación y puede ayudarnos a evolucionar, pero a veces los deseos son poco reales, exagerados o poco factibles y entonces nos decepcionan porque no se hacen realidad.
  • Estrés y decrecimiento

    Después de estos días de fiestas, donde el consumismo vive uno de los momentos álgidos del año y sigue con la época de rebajas incitándonos para que no bajemos el ritmo de gasto, acabaremos enero con fríos invernales y las cuentas y ahorros a bajo cero. Y eso no nos ayudará en nada a controlar nuestro grado de estrés.

  • Recordando a Dr. Vander

    Buscando información sobre estrés y ansiedad encontré los tres volúmenes de la Medicina Natural del Dr. Adrián Valter, holandés que vivió y ejerció en Alemania y llegó a Barcelona el año 1919, donde se casó y abrió una consulta como naturópata.